La tristeza podemos definirla como la tendencia a la soledad y al aislamiento, en general ocasionada por una pérdida o bien una situación que nos genera vicisitud. Es una sensación interior de sofocación frente a una situación.

Al charlar de las diferentes zonas de nuestro cuerpo susceptibles de sentir un placer singular no debemos olvidar la parte posterior de nuestras rodillas. Acariciar esa zona con las yemas de los dedos o bien la palma de la mano hace sentir gran placer.

Compagino prudentemente esta actividad con mi vida profesional, es por ello que necesito organizar mi agenda con cierta antelación. Los encuentros son a partir de una hora y como es lógico, cada uno es diferente, lo mejor es que las cosas surjan de una forma absolutamente natural.

Yo siempre he pensado que ese mal rollo de los hombres a la hora de tener sexo con las embarazadas debe ver con aquel viejo chiste que nos contábamos de jóvenes. Según el que, un recién nacido pregunta a los hombres que pasan cerca de su cuna.

Aunque no sea cierto, ahora usted debe utilizar cualquier estrategia que le asista. Desde el Método Field aconsejamos que siempre y en toda circunstancia sea sincero, pero en este caso la situación deja tomar el peligro de cometer un pequeño engaño.

Nos hemos dado cuenta que, en la medida que hemos experimentado con el amor, vamos agregando contenido y alterando, convirtiendo, lo que está guardado allá y por tanto hemos seguido atrayendo a nuestra vida situaciones que confirman dicha información (sea equivocada o bien no).

Aprendí que las mujeres somos de verdad como el Ave Fénix, renacemos de las cenizas, volvemos a brillar, y todavía más fuerte que antes. Bien afirman que somos como el diamante, cuanto más nos pulen más brillo tenemos.

Los llamados SUEÑOS ERÓTICOS son comunes a todos los seres huma­nos, si bien aún se sabe muy poco sobre lo que pasa en nuestras psiques mientras dormimos, cuando nuestro inconsciente rige nues­tro cerebro en una suerte de piloto automático.

Esta fue una enorme situación por el hecho de que además de alentar mi punto g con su pene, también fue capaz de acariciar mis pechos y clítoris con su mano libre. El roce de nuestras ingleses asistió a aumentar la fricción y la intensidad del instante . Lexi

Sal de tu zona de confort y asume los cambios. En muchas ocasiones no hacemos las cosas pues mismos nos afirmamos que no merecemos eso, que eso no está hecho para mí, que no va conmigo, o bien todavía más simple, no nos atrevemos porque se trata de algo ignoto, lo que no sabemos de…